CARA Y CRUZ
El hambre elige para vivir a los labios ya secos. La sed busca, para existir, la añoranza de la lluvia que tiene la piel de quien no posee más que sus manos...Es el cara y cruz de esa extraña moneda que es vivir, estática quietud de quien nada espera, agitación y anhelo de quien cree que el horizonte se ha trazado para únicamente para sus ojos...
Londres
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